Kali Rose, habitual de los videoclubs, busca el Santo Grial de las perversiones: el Gloryhole. Despues de varios intentos fallidos, finalmente encuentra al novio ideal que trabaja en un videoclub equipado. No pierde el tiempo y se desliza detras de la cortina para descubrir dos pollas listas para ser utilizadas. Sin dudarlo, los chupa con pasion y los mete en su cono hambriento. Llega al extasis al ser follada por estos dos desconocidos. Finalmente, obtiene lo que ha estado buscando durante mucho tiempo: el maximo placer Gloryhole.